Nuestro país tiene un sinfín de destinos fantásticos para visitar. Las provincias del interior esconden bellezas arquitectónicas, culturales y culinarias con las que deleitarse en cualquier época del año. Ahora que la playa no apetece tanto y que nos hemos pulido gran parte de nuestras vacaciones, en Slingo vamos a dar algunas claves sobre estas dos joyas de la zona centro de la península Ibérica para visitar cualquier finde.
1 Toledo o Segovia, consejos para elegir tu destino
Visitar Segovia y Toledo es como entrar en un fascinante libro de historia en tres dimensiones. Son un testimonio vivo de nuestros antepasados, con majestuosos edificios que desafían el paso del tiempo mientras se entrelazan con la modernidad y la sociedad actual. Debido a su tamaño manejable, hay agencias que incluyen la visita de ambas en un solo fin de semana. ¡No lo recomendamos para nada! No cometas el error de ir a pasar el día y volverte en el último Ave a Madrid, ambas ciudades se transforman al anochecer y la iluminación las encumbra (aún más).
2 Toledo, qué ver en un fin de semana
La ciudad de las tres culturas, a 70 kilómetros de Madrid y conectada con la capital en tren de alta velocidad que te permite plantarte allí en menos de media hora. El casco histórico de Toledo, capital de Castilla la Mancha, conserva el trazado de la Edad Media. Piérdete por su entramado de calles estrechas que te descubrirán un conjunto monumental que te enamorará.
Monumentos imprescindibles de Toledo
- La Catedral: a cinco minutos del Alcázar, al que dedicaremos un espacio a continuación, la grandiosa Catedral de Toledo es un must de tu fin de semana a la que podrías dedicarle horas: la Capilla de los Reyes, la Custodia de Oro, el Coro…
- Plaza del Ayuntamiento, Palacio Arzobispal y la Iglesia de los Jesuitas. Esta última situada en el punto más alto de la ciudad desde donde respirar una fantástica panorámica.
- La Judería: en este barrio te toparás con el Archivo Municipal y la Iglesia de Santo Tomé, hogar de la obra maestra de El Greco “El entierro del Conde Orgaz”. Un poco más adelante, la Sinagoga del Tránsito y la de Santa María la Blanca, el Monasterio de San Juan de los Reyes… y muchas tiendecitas de artesanía en las que no podrás evitar pararte.
El Alcázar de Toledo
Impresionante fortificación que se impone desde lo alto de la ciudad. La historia de este emblema es extensa, remontándose hasta los visigodos, cuando el rey Leovigildo estableció en Toledo su capitalidad. Después la época musulmana, posteriormente la Reconquista, la Edad Moderna, la Época Contemporánea… muestra viviente de nuestra historia que te invitamos a descubrir in situ. Hoy alberga la sede del Museo del Ejército. ¿Sabías que la palabra alcázar viene del árabe, “al qasar” que significa “fortaleza”?
Gastronomía en Toledo
Podrás elegir desde bares de caña y tapa a restaurantes de estrella Michelín. Pregunta por las carcamusas, un delicioso guiso de carne con tomate y guisantes, la perdiz a la toledana o el cocido “tres vuelcos”. Si paseando por sus calles te embriaga un olor especial, probablemente sea el perfume de la almendra de su mazapán, su postre estrella. No dejes de probarlo, incluso si no eres la más fan del mazapán…
3 Segovia, qué ver en un fin de semana
Parte del encanto de esta ciudad castellana es su tamaño reducido y manejable que permite visitarla de forma pausada y sin agobios. Piérdete por su casco antiguo y deja que el tiempo se detenga a los pies de sus fachadas milenarias, plazas empedradas y torreones habitados por nidos de cigüeñas. La conexión con Madrid es de poco más de 20 minutos en AVE.
Lugares que visitar en Segovia
Pasea su popular calle Real desde la plaza del Azoguejo hasta el Alcázar. ¡Un espectáculo de otro nivel! Algunas claves de lo que te encontrarás:
- El Acueducto, of course. Construido por los romanos para llevar agua de la sierra al centro de la ciudad. Impresiona pensar cómo lo hicieron, sin cemento alguno entre las piedras de sus 167 arcos y 28 metros de altura en su parte más alta. También está la versión- leyenda que cuenta que es una construcción del diablo a cambio del alma de una cansada aguadora. ¿Serás capaz de encontrar al diablo haciéndose un selfie con su creación?
- Casa de los Picos: edificio del siglo XV que hoy en día alberga la Escuela de Arte y Diseño. En cuanto la veas sabrás el porqué de su nombre.
- La Alhóndiga: uno de los pocos ejemplos del estilo gótico industrial del XVI, durante la época de los Reyes Católicos, y la Plaza de Medina del Campo
- Plaza Mayor y Catedral: conocida como la Dama de las Catedrales por sus dimensiones, es de estilo gótico (s. XVI y XVII) y tiene una torre de 88m de altura.
- Además: barrio de la Judería, Casa Museo de Antonio Machado, la Casa de la Moneda…
El Alcázar de Segovia
Cualquier lugareño te contará orgulloso que su Alcázar inspiró el clásico castillo emblema de Disney, pero lo cierto es que esa comparativa se queda pequeña. Este impresionante palacio real, edificado sobre una roca en la confluencia de los valles del Eresma y el Clamores, es de visita obligada. Su torre del Homenaje es a menudo comparada con un barco navegando entre dos ríos y es un símbolo reconocido internacionalmente. ¡Querrás volver!
Lo mejor de la gastronomía segoviana
Los asados y platos de cuchara son claves de la cocina de esta ciudad. La fama del cochinillo asado ha traspasado fronteras y el lechazo asado en horno de leña no se queda atrás. Para entrar en calor, nada como unos judiones de la Granja, unas judías tamaño XL con una textura especial. Y en la sección de postres, quizá lo más famoso sea el ponche segoviano. Un bizcocho con crema y mazapán deliciosamente dulce.
5 Toledo o Segovia, ¿cómo elegir el mejor destino para ti?
Mientras que la historia de Segovia (Castilla y León) se remonta al Imperio Romano y sus impresionantes creaciones a los pies de la sierra de Guadarrama, Toledo (Castilla La Mancha) vibra con los sonidos de tres civilizaciones magistralmente entrelazadas: cristina, musulmana y judía. Después de leer este post, ¿serías capaz de quedarte solo con una?
Conclusión/cierre
La elección entre Toledo y Segovia no está nada fácil. En ambas te sentirás como paseando en un cuento de hadas y, mires donde mires, habrá algo a lo que fotografiar. Lo mejor es que programes dos escapadas de fin de semana para visitar Toledo y Segovia y nos cuentes cuál de las dos ciudades se lleva el oro, ¿aceptas el reto?